Una de las máximas preocupaciones en el desarrollo de un proyecto web, tanto para el cliente como para el equipo de desarrollo, es conseguir un diseño que revele la belleza a través de simplicidad y funcionalidad. Además, es una constante el que consigamos un producto veloz, posicionable y accesible. Por ello, es muy importante seguir una metodología, unos pasos para desarrollar un proyecto web.

Siempre ayuda conocer el ‘toque’ del proyecto, normalmente una palabra o frase que defina la parte central.

Rara vez enviamos en un primer contacto con el cliente una imagen ‘definitiva’ o wireframe de cómo será el proyecto, esto puede llevar al cliente a centrarse en una idea que aún no está madurada y seguramente inducirá a error. En cualquier proyecto con cierta seriedad se elaborarán diseños y sucesivas actualizaciones hasta llegar al producto, diseño deseado.

Es muy importante que el cliente se involucre en el diseño, por lo que enseguida le asignamos una dirección para que pueda seguir de cerca la evolución del proyecto.

En la mayoría de los casos el cliente aparecerá con tan solo una idea muy subjetiva de lo que está buscando, entonces, lo más normal es que demos comienzo con la identificación básica de la imagen, el logotipo, buscaremos que colores corporativos se quieren añadir, texturas, tipografía, etc. Es importante en este momento preguntar en que parte del diseño quieren que nos centremos más, de esta forma estaremos consiguiendo información sobre los gustos de la persona o empresa que nos ha contratado.

En esta ocasión no nos vamos a centrar en el target al que irá dirigido el proyecto, esto nos llevaría a separarnos demasiado del núcleo del desarrollo, pero si sería ideal tener un objetivo lo más universal posible.

Siempre que sea posible, enriqueceremos el proyecto con los elementos multimedia que den variedad y utilidad, lo ideal sería disponer según que nicho estemos trabajando, de una galería fotográfica y por supuesto algún vídeo.

Aunque por ahora solo estamos hablando de diseño, es muy importante tener en cuenta desde el principio, que la mayoría de sistemas se basan en gestión de contenidos con bases de datos que se gestionan desde algún tipo de back-end, hay que tener muy claro el esquema y diseño de la base de datos, así como que sistema implementar, en este artículo encontrarás más información al respecto.

Desarrollo página principal y subpáginas

Parece lo más lógico comenzar un diseño por la página principal, pero tras años de experiencia estamos en condiciones de pensar que no siempre es lo más adecuado, más aun si no hay una idea clara de lo que está buscando el cliente, si comenzamos con el diseño de una subpágina (con menos elaboración que la página principal) estaremos en cierta manera pensado y modelando cómo será su página padre, la home de un portal siempre es más flexible a cambios, con más ‘garra’.

Página home o principal

Es cierto que hay que prestar especial dedicación y atención a esta página, pues es el primer impacto que los internautas van a ver, éste tiene que recabar el máximo de información de un vistazo, hay que evitar en la medida de lo posible el uso excesivo de scroll.

el internauta es el conductor de un vehículo que circula a gran velocidad y nuestras webs son carteles publicitarios que tienen que ser capaces de captar su atención y transmitir la información en el menor tiempo posible

Deberemos estructurarla de tal manera que nos permita introducir cambios rápidamente cuando nos lo solicite el cliente, normalmente cuando hay que añadir algún tipo de banner, siempre hay eventos puntuales que publicitar, alguna campaña, o simplemente un cartel de ‘cerrado por vacaciones’. Además el pensar en una estructura flexible nos dará ocasión de hacer pequeños cambios de imagen sin que acarreen quebraderos de cabeza.

Posicionamiento SEO

No es el eje central de este artículo extendernos en este punto, si quieres puedes ampliar información en nuestra categoría SEO, si bien aquí nuestra recomendación es orientar siempre el desarrollo desde el principio al posicionamiento.